[The Slot Dec 42] - Misión 8ª - 03Dic1942 - 15:00h - DEBRIEF
Publicado: 01 May 2012, 23:57
GUADALCANAL
3 Diciembre 1942
1730 horas
Las previsiones climatológicas para las 1500 horas no eran nada halagüeñas pero aún así las órdenes eran las órdenes, los japoneses no se iban a parar por una simple tormenta tropical. Pero cuando salimos de nuestras destartaladas chozas el sol brillaba en todo lo alto y tan solo una nubes bajas a 1.300 metros nos impedían tener un visibilidad total. Esto me levantó el ánimo. Tenía la sensación de que iba a ser un buen día.
Las bajas de los últimos días estaban siendo notables y para la misión no podíamos contar con muchos pilotos. Aún así pudimos poner en vuelo 8 Avengers (Sombra) cargados con 2.000 lb en bombas y nuestra escolta de Corsair (Angeles). Además, pudimos contar con otros 8 Corsair (Halcón) en una arriesgada misión: adelantarse a la zona objetivo para despejar el camino a los torpederos. Misión peligrosa si tenemos en cuenta los antecedentes de misiones anteriores donde el número de zeros japoneses les daba la superioridad en la zona. Sabíamos que el destructor japonés se había quedado algo retrasado respecto al convoy principal de mercantes debido a los daños sufridos en su encuentro con nuestros buques de guerra y que los transportes navegaban a su objetivo sin protección. Por eso el movimiento de los Halcones era arriesgado, se podían encontrar en inferioridad pero si conseguían desequilibrar la balanza el final del convoy estaba firmado.
Una vez reagrupados sobre Henderson los Sombra tomamos rumbo oeste, siguiendo el litoral hasta Cabo Esperanza. Halcón líder (Willy) dirigía sus Corsairs por el interior de la isla directamente hacia Yaro Bay y Tambugo, donde tendrían que empezar a vigilar el cielo y donde se esperaba la caza enemiga protegiendo los restos del convoy Bravo. 5 Km. antes de que el grupo Sombra llegara a la altura de Cabo Esperanza, los Halcones avistaron el convoy y por encima de ellos un grupo de 6 cazas japoneses. Ordené potencia máxima a los Sombra y viramos al sur en dirección a los transportes japoneses.
Cuando llegamos unos minutos después los Halcones se habían deshecho de los zeros y ante nosotros teníamos los seis mercantes en formación en rumbo sur. Iniciamos un ligero picado para atacar por la banda de estribor, desde el mar a tierra, y seleccionamos cada uno de los Avengers nuestro objetivo. Las turbulencias a baja cota eran acusadas y me costaba controlar mi montura y los nervios por salir de allí cuanto antes hicieron el resto, así que fallé mi primera pasada. Pero los impactos de mis compañeros, Sombra Tres (Mac), Cinco (Héctor) y Siete (Jerónimo) me dieron confianza. Rápidamente viramos de nuevo para encarar la flota, esta vez por babor, y ¡booommmm! esta vez sí, una de las bombas impactó de lleno en el petrolero que iba a proa de la formación. El artillero de Sombra Tres comunicó que su segunda tanda también había impactado pero no habían llegado a explotar.
Como si fuera un ballet los Sombra viramos a derecha y nos reagrupamos rápidamente, saliendo como demonios de la zona viendo cómo el destructor japonés se acercaba al convoy escupiendo fuego con todo lo que tenía pero ya era demasiado tarde. Los Halcones había podido presenciar la batalla desde la altura y juntos salimos en rumbo norte hacia Cabo Esperanza con el deber cumplido y sin haber tenido ninguna baja en ninguna de las formaciones.
Al cabo de unos 40 minutos de haber salido ya estábamos de vuelta en Henderson, pero algo no iba bien, la antiaérea de los aeródromos estaban activas y los Halcones se adelantaron de nuevo para limpiar la zona. Los Zeros japoneses se atrevieron incluso a ametrallar a baja altura pero tanto la AAA como los Corsairs cobraron el peaje debido. Tras la calma los Avengers fuimos aterrizando ordenadamente bajo la vigilancia constante de los Halcones.
Una vez en casa nos informaron de la llegada del buque petrolero que estábamos esperando. Buena noticia, esto nos dará una alivio por unos semanas.
P.D: Gracias a todos por la misión. Hay veces que las cosas no salen como uno espera y en otras ocasiones es al contrario. El resultado de ayer fue inmejorable. Creo que podemos destacar la sincronía entre todos los pilotos que volamos y el notable ascenso de Mac en sus habilidades destructoras. Aunque él se empeñe en negarlo, esta campaña lo demuestra. Y gracias a la escolta, no lo olvidemos, así da gusto atacar un convoy
3 Diciembre 1942
1730 horas
Las previsiones climatológicas para las 1500 horas no eran nada halagüeñas pero aún así las órdenes eran las órdenes, los japoneses no se iban a parar por una simple tormenta tropical. Pero cuando salimos de nuestras destartaladas chozas el sol brillaba en todo lo alto y tan solo una nubes bajas a 1.300 metros nos impedían tener un visibilidad total. Esto me levantó el ánimo. Tenía la sensación de que iba a ser un buen día.
Las bajas de los últimos días estaban siendo notables y para la misión no podíamos contar con muchos pilotos. Aún así pudimos poner en vuelo 8 Avengers (Sombra) cargados con 2.000 lb en bombas y nuestra escolta de Corsair (Angeles). Además, pudimos contar con otros 8 Corsair (Halcón) en una arriesgada misión: adelantarse a la zona objetivo para despejar el camino a los torpederos. Misión peligrosa si tenemos en cuenta los antecedentes de misiones anteriores donde el número de zeros japoneses les daba la superioridad en la zona. Sabíamos que el destructor japonés se había quedado algo retrasado respecto al convoy principal de mercantes debido a los daños sufridos en su encuentro con nuestros buques de guerra y que los transportes navegaban a su objetivo sin protección. Por eso el movimiento de los Halcones era arriesgado, se podían encontrar en inferioridad pero si conseguían desequilibrar la balanza el final del convoy estaba firmado.
Una vez reagrupados sobre Henderson los Sombra tomamos rumbo oeste, siguiendo el litoral hasta Cabo Esperanza. Halcón líder (Willy) dirigía sus Corsairs por el interior de la isla directamente hacia Yaro Bay y Tambugo, donde tendrían que empezar a vigilar el cielo y donde se esperaba la caza enemiga protegiendo los restos del convoy Bravo. 5 Km. antes de que el grupo Sombra llegara a la altura de Cabo Esperanza, los Halcones avistaron el convoy y por encima de ellos un grupo de 6 cazas japoneses. Ordené potencia máxima a los Sombra y viramos al sur en dirección a los transportes japoneses.
Cuando llegamos unos minutos después los Halcones se habían deshecho de los zeros y ante nosotros teníamos los seis mercantes en formación en rumbo sur. Iniciamos un ligero picado para atacar por la banda de estribor, desde el mar a tierra, y seleccionamos cada uno de los Avengers nuestro objetivo. Las turbulencias a baja cota eran acusadas y me costaba controlar mi montura y los nervios por salir de allí cuanto antes hicieron el resto, así que fallé mi primera pasada. Pero los impactos de mis compañeros, Sombra Tres (Mac), Cinco (Héctor) y Siete (Jerónimo) me dieron confianza. Rápidamente viramos de nuevo para encarar la flota, esta vez por babor, y ¡booommmm! esta vez sí, una de las bombas impactó de lleno en el petrolero que iba a proa de la formación. El artillero de Sombra Tres comunicó que su segunda tanda también había impactado pero no habían llegado a explotar.
Como si fuera un ballet los Sombra viramos a derecha y nos reagrupamos rápidamente, saliendo como demonios de la zona viendo cómo el destructor japonés se acercaba al convoy escupiendo fuego con todo lo que tenía pero ya era demasiado tarde. Los Halcones había podido presenciar la batalla desde la altura y juntos salimos en rumbo norte hacia Cabo Esperanza con el deber cumplido y sin haber tenido ninguna baja en ninguna de las formaciones.
Al cabo de unos 40 minutos de haber salido ya estábamos de vuelta en Henderson, pero algo no iba bien, la antiaérea de los aeródromos estaban activas y los Halcones se adelantaron de nuevo para limpiar la zona. Los Zeros japoneses se atrevieron incluso a ametrallar a baja altura pero tanto la AAA como los Corsairs cobraron el peaje debido. Tras la calma los Avengers fuimos aterrizando ordenadamente bajo la vigilancia constante de los Halcones.
Una vez en casa nos informaron de la llegada del buque petrolero que estábamos esperando. Buena noticia, esto nos dará una alivio por unos semanas.
P.D: Gracias a todos por la misión. Hay veces que las cosas no salen como uno espera y en otras ocasiones es al contrario. El resultado de ayer fue inmejorable. Creo que podemos destacar la sincronía entre todos los pilotos que volamos y el notable ascenso de Mac en sus habilidades destructoras. Aunque él se empeñe en negarlo, esta campaña lo demuestra. Y gracias a la escolta, no lo olvidemos, así da gusto atacar un convoy